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Limpieza de fosas nazales

La higiene de fosas nasales consiste en la limpieza mecánica que se realiza en éstas cavidades.
La obstrucción nasal es algo tan simple como la dificultad más o menos intensa para respirar por la nariz.
La nariz produce un moco pegajoso para atrapar pequeñas partículas de polvo que podrían ser perjudiciales para los pulmones. Sin embargo, este moco puede endurecerse y tapar tus fosas nasales, siendo esto bastante incómodo. Afortunadamente, es muy fácil deshacerse de esta mugre. Todo lo que necesitas son algunos elementos o soluciones médicas que pueden encontrarse alrededor de la casa.
1.- Busca un poco de intimidad. Hurgar dentro de la nariz delante de otras personas se considera de mala educación en la mayoría de las culturas. Si puedes encontrar un espejo para revisarla, es incluso mejor.
2.-Lávate las manos. Tu nariz es una membrana mucosa sensible, por lo que es vulnerable a los gérmenes e infecciones. Lava bien tus manos con jabón y agua tibia, o por lo menos frota un poco de gel antibacterial sobre ellas.
3.-Suénate la nariz con un pañuelo desechable. Esto debe limpiar los orificios nasales en gran parte, y que te ayudará a desalojar cualquier cosa que se rehúse a salir sin ayuda. Esta es la forma más efectiva de hacerlo:

·         Sujeta el pañuelo desechable sobre tu nariz, por encima de ambas fosas nasales.
·         Tapa un orificio nasal. Solo tienes que presionar hacia el centro de la nariz con la mano y el pañuelo, hasta que ya no puedas expulsar el aire a través de él.
·         Sopla aire por la nariz. Solo debes expulsar moco de la nariz que no fue bloqueada. Sopla completamente, hasta que todo el aire haya salido de tus pulmones.
·         Libera presión en la fosa bloqueada, presiona el otro orificio nasal con la otra mano, y sopla de nuevo. Debes estar expulsando moco solo desde el orificio libre.
·         Limpia el moco residual de la parte inferior de la nariz.
4.-Sopla de nuevo (opcional). Si todavía sientes que queda un poco de moco, toma un pañuelo desechable nuevo y suénate de nuevo ambas fosas nasales. Si no, pasa a la siguiente etapa.


5.-Limpia cualquier moco restante en el lugar. Hurgar en tu nariz nunca es una cosa totalmente higiénica, pero puedes hacerlo en un apuro. Esta es la forma de hacerlo con la mayor seguridad posible.
·         Suavemente pásalo alrededor de la orilla para recoger cualquier moco.
·         Coloca una parte limpia del pañuelo hasta la punta de tu dedo y repite en la otra fosa nasal.
·         Toma un pañuelo desechable limpio, y dóblalo sobre la punta de tu dedo índice.
·         Inserta el dedo cubierto con el pañuelo en un orificio nasal.

6.-Revisa los resultados en el espejo (opcional). ¡Si tienes cerca un espejo, úsalo! Inclina la cabeza hacia atrás y asegúrate de que ambas fosas nasales estén.

7.-Lávate las manos de nuevo. Cuando hayas terminado, limpia tus manos de nuevo para asegurarte de no tener ningún moco sobrante en ellas. ¡Disfruta del resto del día con una nariz limpia!



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